La pintura al óleo consiste en utilizar aceites vegetales ( de linaza )como aglutinante de los colores, lo que permite una mayor riqueza cromática y detallismo en la ejecución. Eso es porque al usar el aceite el secado de los pigmentos puede acelerarse (mezclado con disolvente o aguarrás) o ralentizarse varios días (uso puro), lo que permite al pintor rectificar sus errores o modificar la obra si lo desea . La mezcla con abundante esencia de trementina, vulgarmente conocido como aguarrás, permite además dar capas de pintura muy tenues (veladuras) que secan rápido, donde los colores pueden superponerse o trasparentarse sin notar la transición con lo que los matices cromáticos son infinitos. El óleo proporciona también colores más vivos , transparentes y brillantes, que no se apagan con el paso del tiempo.
Todos estos motivos hicieron que , a partir del s. XV y, gracias a la los Primitivos Flamencos,esta técnica se impusiera sobre el temple y que siga siendo muy utilizada hoy en día.
La pintura al temple se obtiene de mezclar los pigmentos molidos, de origen mineral y orgánico con agua y cola o grasa animal. Esta operación se llamaba "templar los colores", de ahí la denominación de pintura al temple. Los colores obtenidos son muy variados, densos y resistentes.
La pintura al temple tuvo su mayor desarrollo en el arte de la Edad Media sobre todo a partir de la difusión de los iconos bizantinos. Fue la técnica más utilizada para el arte, sobre todo sobre paneles de madera (tablas), que prestaban el mejor soporte para la pintura. La grasa de origen animal mas utilizada fue la yema de huevo.Los diseños se retocaban con materiales preciosos: aplicaciones de pan de oro, piedras preciosas o molduras de yeso fingiendo relieves que luego se recubría de colores. Progresivamente, el temple fue decayendo con el avance del óleo.
Hoy por hoy el temple se prepara industrialmente, mezclado como desde antiguo con agua y cola. Es una pintura menos resistente pero muy barata que se emplea comúnmente para pintar paredes y para realizar escenografías.
La pintura al fresco se aplica sobre el muro. La técnica varía a lo largo de los siglos desde que , por ejemplo , se utilizara en los hipogeos egipcios o las domus romanas. En los templos medievales se alisaba el muro aplicando un enfoscado y luego se untaba cada parte a pintar esa jornada con un enlucido mas fino que se coloreaba mientras estaba fresco.
Este vídeo de 20' explica las ténicas románicas de la pintura al fresco y al temple.